JOAN MANUEL SERRAT |
Nos interesa crear un
espacio donde se escuche a los grandes Juglares y Trovadores de América
desde las décadas de los años 60 y 70: Joan Baez y Bob Dylan en
Norteamérica. Y en América Latina y España, Violeta
Parra, Mercedes Sosa, Soledad Bravo, Víctor Jara, Rubén
Blades, Caetano Veloso, Silvio Rodríguez, Alfredo
Zitarrosa, Joan Manuel Serrat, Paco Ibañez, León Gieco, Piero de Benedictis,
Facundo Cabral, Gian Franco Pagliaro, Ana y Jaime y Pablus
Gallinazus, entre muchos otros. Sin dejar de lado la Música
Andina y los ritmos del altiplano, en especial el trabajo legendario
de grupos como Inti-Illimani, Quilapayún, Illapu, Caifanes, Juglares,
Chimizapagua y Dama-Wha.
VIOLETA PARRA |
“Nadie puede amar lo
que no conoce”, por eso tenemos la obligación de posibilitar que las nuevas
generaciones conozcan la música folklorica tradicional y contemporánea, ya no
solo de su país sino del mundo entero, porque somos una aldea global. Y tenemos
la absoluta seguridad que cuando la conozcan la van a amar.
BOB DYLAN |
“JUGLARES Y TROVADORES HOY: LA MÚSICA POPULAR Y SU RECONOCIMIENTO”.
ENSAYO DE GABRIEL JIMÉNEZ EMÁN
La aparición del
disco transformó radicalmente la percepción de los cantores y trovadores, que
se convirtieron, con el fenómeno masivo de las grabaciones – y ahora de los
videos— en los nuevos ídolos de masas. Ya no se perciben como personalidades
que identifican una región o un país, sino a quienes venden más discos y son
capaces de sustituir tradiciones y culturas de cualquier país por medio de la
penetración cultural que imponen las disqueras, a través de un gusto estándar
homogeneizado de modo internacional.
Una de las imágenes
bajo las cuales se nos presenta un trovador es acompañado de su guitarra,
arpegiando con ésta las melodías que canta. Si antaño fueron la cítara en
Grecia, el laúd en Inglaterra y la vihuela en España, la guitarra ha sido la
continuación histórica de estos instrumentos, hasta convertirse en el
instrumento popular por excelencia y el más completo entre éstos.
Hace poco, con motivo
de concederse el Premio Nobel de Literatura a Bob Dylan, no se hicieron esperar
las reacciones de los puristas académicos y de otros escritores que se sienten
ungidos por los dioses en el momento de escribir, declarando su estupor porque
este premio se estaba concediendo a un “cantante”. Se suele olvidar a veces que
uno de los textos fundadores de la poesía castellana, el Poema de Mío Cid, fue
escrito por un juglar anónimo del siglo XII, y que algo similar se puede
apreciar en lengua francesa con La canción de Rolando y en los importantes
juglares y trovadores del mediodía francés, los trovadores provenzales de la
Edad Media de donde proviene la gran poesía lírica occidental, poetas que iban
de plaza en plaza, de ventana en ventana y de taberna en taberna diciendo sus
poemas; los juglares también hacían esto y no escribían necesariamente ellos
mismos sus poemas, mientras que los trovadores sí.
Nunca he tenido dudas
acerca de que Bob Dylan sea un poeta, un trovador moderno, como bien pueden
serlo John Lennon o Joan Manuel Serrat. Se trata de trovadores populares,
provenientes de clases obreras o trabajadoras, y de un profundo conocimiento de
la realidad social que les rodea; en ellos está perfectamente reconocido un
sentimiento de voluntad para expresar lo individual, la subjetividad personal,
es cierto, pero también se han hecho eco de las distintas problemáticas
sociales o ideológicas de su tiempo, han retomado sus particulares mitos,
fabulas o tradiciones, las cuales han vertido en letras (lyrics, en inglés) de
una gran fuerza emotiva y participado de sus inquietudes intelectuales y
críticas. En trovadores como el catalán Joan Manuel Serrat o el brasilero Chico
Buarque encontramos a dos poetas de alto rango. Serrat rezuma el espíritu
poético catalán con irradiación a toda España; ha logrado comunicarnos la
nostalgia, el amor y la alegría con una especial jocosidad y un personal
desenfado, además de las magníficas versiones que ha realizado de los grandes
poetas españoles Miguel Hernández y Antonio Machado.
TÍO CAIMÁN CAFÉ FOLK busca promover los talentos locales de la música folklórica mediante presentaciones en vivo en la sede de su establecimiento, para
brindar espacio al arte popular tradicional y contemporáneo, con
una visión global que permita crear vínculos, por ejemplo,
entre las bandas norteamericanas de blues y los alabaos de las cantaoras
de Timbiquí, expandiendo las fronteras musicales. El propósito es estimular el
interés del pueblo por su propia cultura y facilitar la creación y
fortalecimiento de lazos fraternales de convivencia, en la medida que se
comparte un conjunto de valores universales.
GRUPO JUGLARES (CALI)
El Grupo Juglares es, uno de los exponentes más importantes de música colombiana y latinoamericana. Con más de veinte años de trabajo e investigación Juglares ha sido merecedor de importantes reconocimientos como El Premio a la Excelencia en el Festival del Pasillo en el 2009. El grupo ganó en dos oportunidades el Festival del Mono Núñez, inicialmente en 2006 cuando recibieron el premio como mejor grupo instrumental y en 2010 cuando obtuvieron el Gran Premio Mono Núñez. Luego, representaron a Colombia en 2011 en el Festival de Cosquín, en Argentina. Estuvieron en el Festival de Viña del Mar 2012, en donde fueron galardonados con la Gaviota de Plata en la categoría de Mejor Intérprete en compañía de la cantante caleña Anabella.
Fuente: https://caliescribe.com/es/arte/2016/09/17/10595-grupo-juglares-casa-proartes
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